Resultaba ser que si, se habían dedicado a realizar las compras de la despensa mientras Waccha esperaba por ellos en casa, o por lo menos eso deseaba pensar... Gracias al cielo al volver el gato parecía estar no tan de mal humor y fue sencillo atraerlo hacía a ellos para llevarlo a la alameda como habían acordado que harían. Tanto el felino de la casa como ellos mismos requerían de relajarse un poco con respecto al trabajo, con respecto a su relación con Waccha... un tanto de todo.
Si, fue algo difícil convencer a la mascota de caminar a su lado, pero nada más reconoció el sitio en donde se encontraban y emprendió una carrera en la que difícilmente podrían darle alcance: Era más que obvio que sabía a qué lugar debía acudir si lo que deseaba era divertirse asustando a las aves que ciertas ancianitas acostumbraban a alimentar con migajas de pan.
Ellos por su parte aprovecharon también para dar una buena caminata, sabía que el pelinegro se demoraría lo que le viniera en gana para sacar su estres acumulado. A penas y volvió a ellos justo a tiempo para que los tres pudieran refugiarse de la lluvia que ya de rigor hacía acto de presencia por las tardes. Waccha se notaba cansado, con necesidad de mimos, por lo que en el camino de regreso a casa no dudó en ir acariciándole el lomo tal y como sensei le explicase la noche anterior... ¿Era posible? Con aquellas muestras de afecto resultó que consiguió hacer que el pequeño animal se quedase profundamente dormido sobre su regazo.
- ¿Sensei? Me da pena despertarlo, pero hay una despensa por acomodar en el departamento. ¿Cómo se procede en estos casos? Siento que al más mínimo movimiento se despertara...- Le comentó a su pareja en cuanto llegaron al estacionamiento de su hogar - Y lo que es peor, siento que lo hará de mal humor.
Sujk Arkhelism
Durante el día habían estado fuera de casa, primero con las compras de la despensa y luego fueron por Waccha. La verdad el pelinegro se había portado de mejor humor que otros días. Nada más vio la alameda y los ojos le brillaron. No pudo evitar sentirse mal, se notaba a leguas que su mascota carecía de atención y eso le dejaba preocupado de alguna manera, pero Yuuto estaba a su lado, tratando de comprender la situación y por supuesto, apoyándolo como siempre. Agradecía a su novio por ello, de otro modo, quien sabe que hubiese sido de él en tal situación.
Bastaba con pensar en le mes venidero, serían días complicados, pero no quería estresarse con anticipación. Yuuto y él pasearon por la alameda, mientras Waccha hacía su recorrido también, ambos platicaron de varias cosas, y bromearon como era lo típico en su relación. Cualquiera que los mirase, no se haría a la idea de que eran pareja, puesto que siempre actuaban como amigos.
La noche cayó junto con la lluvia y decidieron marchar para el departamento, el cual no estaba nada lejos. Ambos estaban ahora en el estacionamiento y Waccha dormía en el regazo de su novio. Le miró de reojo de manera divertida y entonces recargó uno de sus codos sobre el volante y con la palma de su mano recargó su mejilla para mirar al otro. — ¿Y sí aprovecho el momento para besarte? No creo que se despierte. — Le cejeó completamente pícaro como pocas veces.
Yuuto Shinji
En silencio observaba los movimientos de su pareja, el hombre en lugar de meter prisa parecía comenzar a ponerse cómodo, pero... ¿cómodo para qué? La respuesta a su interrogante llegó más pronto que nada... Su pareja se estaba poniendo en plan pícaro y eso no era algo que ocurriera muy seguido, al menos no sin alguna connotación más intima de por medio. - Momento... - Susurró intentando no reírse- Osea que cuando no descompones el cinturón de seguridad, ocupas a tu mascota para dejarme acorralado y besarme en el auto ¿o cómo es tu táctica? - Preguntó ladeando un poco el rostro para mirarlo casi de frente, con una ceja elevada, le sonreía con la misma picardía.
Sujk Arkhelism
Fue cómplice de esa sonrisa que el menor intentaba dejar y no dejar a flote, al final, tuvo el mismo gesto que él con respecto a lo que había dicho. —¿De qué tácticas me hablas? Yo no sé nada. — Se hizo el desentendido del asunto. Claro hizo el intento de acercarse un poco para dejar su rostro muy cerca del menor, quien ahora le miraba de frente. — A veces solo hay que aprovechar las oportunidades que no se tienen muy a menudo. — Susurró con ganas de provocar a su menor.
Yuuto Shinji
- Eres un hombre con tácticas, yo lo sé... - El rostro de Sujk se acercaba y dejándose en evidencia, no pudo evitar mirar fugazmente un par de veces los labios de su pareja. Igual intentó sostenerle la mirada. - Tú siempre tienes oportunidades conmigo y si no es así las buscas... - Si de provocar se trataba, debía admitir que bien que le había aprendido al mayor, porque de no ser así, no sabía como era que podía contenerse las ganas de solo acariciarle los labios superficialmente sin arrojarse directamente a besarle... En sus muslos Waccha ronroneó sonoramente como muestra de que continuaba bien sumergido en sus sueños.
Sujk Arkhelism
— Hmm... me parece que cierto niño me está conociendo mejor... — Ahora miraba los labios de Yuuto, estaban tan cerca de él, tentado estuvo a acariciarle los rebordes, y eso hizo; tentado estuvo a besarle de lleno, pero una sonrisa de arrogancia se le surcó en los labios, por hoy no le iba a besar. Tomó a Waccha en ese pequeña distracción y se lo acomodó entre los brazos, el felino pareció despertar de buen humor. — Lástima, uno debe hacer deberes de padre. — Se alejó sin más, dejando al menor dentro del auto, pues se atrevió a dejarlo dentro una vez que salió y comenzó a caminar hacía su departamento.
Yuuto Shinji
Esbozó una amplia sonrisa, le gustaba cuando sensei le insinuaba que le estaba conociendo cada vez mejor... Después de todo, era lo que debía hacer conforme iban desenvolviéndose como pareja ¿cierto? Tentado estuvo a volver a hablar y acariciarle los labios superficialmente otra vez, pero entonces el calor sobre su regazo desapareció, de buenas a primeras sensei había tomado en brazos a Waccha y a él le dejaba más que descolocado. - ¿Eh? - Balbuceó a penas. ¿Deberes de padre? ¡Que no le jodiera con eso! Rápidamente salió del auto, asegurándose de dejar su puerta bien cerrada... Hum, ya se veía dejando al mayor acomodando en solitario la despensa, porque de momento no se había ganado su ayuda. Igual aceleró el paso para intentar darles alcance a esos dos.
Sujk Arkhelism
Yuuto no tardó nada en alcanzarles, en las manos tenía algunas bolsas de despensa y otras las llevaba en otra bolsa más grande. Claro que él también se hizo con algunas bolsas, quizá las más pesadas, pues ahora Waccha ya caminaba a su lado y le era más fácil llevar las cosas. Llegaron al departamento y ya adentro, se fueron a la cocina, quería que Yuuto le ayudase a acomodar, al menos lo esperaba. Se giró sobre sus talones y comenzó a abrir las gavetas que conformaban esa cocina, comenzaría con las cosas enlatadas.
Yuuto Shinji
¿Maneras de manifestar su disgusto? Bien, tenía varias. Entre ellas estaba el dejarle a Sujk las bolsas de despensa sobre la barra de la cocina y en silencio pasar a retirarse a la habitación. Si no iba a disfrutar de ninguna clase de privilegio por esa noche, mil veces prefería ponerse la ropa para dormir y meterse a la cama... Waccha no demoró en hacerle compañía, no sabía si habían hecho las paces, pero parecía agradecido luego de que le hubieran llevado de paseo esa tarde-noche - Te has divertido ¿no? - Era momento de iniciar conversación con el otro. - ¿Y si te prometo repetir esto al menos una vez por semana? - Waccha se recostó en la almohada que le correspondía a su amo, era obvio que deseaba mimos parecidos a los de la noche anterior...
Sujk Arkhelism
Revoleó los ojos cuando su menor hizo aquel berrinche de irse a la habitación con Waccha y dejarle solo. Igual ya se las arreglaría solo para acomodar todas las cosas en donde correspondían. Al menos su mascota se encontraba mejor que otras veces, joder, que les estaba costando un poco tratar de contentar al felino. Ahora todo estaba tranquilo. Llevaba minutos metido en la cocina, ya hacía un buen rato que azotaba puertas, de buena manera claro, pues acomodaba la despensa de un lugar a otro. Pronto recordó que Waccha no había cenado y sacó una de tantas latas de comida que tenía guardadas en un estante y... — ¡Waccha, tu cena! — Le gritó al felino, sabía que con ello su mascota iría corriendo, ya era costumbre en ellos dos entenderse así. Cuando quiso abrir la lata, se le complicó un poco, quiso jalar más, y luego más, hasta que de golpe se abrió y le pasó a cortar con el filo de la tapa el dedo pulgar. Joder, que no había visto tanta sangre brotar de un solo dedo, al parecer la herida profundizo. Tuvo una cara de disgusto al ver su desastre sobre la pequeña cocina integral, se apresuró a vaciar la comida de Waccha, tiró la lata y quiso enjuagar la herida, pero la sangre parecía brotar cada vez más. Joder, que esas cortadas eran las que más dolían, se quedó allí en el lavabo, presionando su dedo pulgar, su mano estaba hecha un desastre.
Yuuto Shinji
¡Ah! Waccha traidor... se había marchado, encima sensei ya no había hecho por responderle los mensajes de texto. ¿Estaría haciendo berrinche por su necedad por no escribirle lo que quería? Revoleó los ojos y dejando el móvil bajo la almohada fue que se decidió a ir a echar un vistazo a la cocina, igual y sensei si se estaba haciendo todo un lío con la despensa que ambos ocuparían... Luego de escribirle tanta sarta de cursilerías, la verdad era que la molestia ya ni era tanta. Se excusaría diciendo que iba a por un vaso de agua y listo.
Iba por el pasillo cuando escuchó que el agua del lavamanos en la cocina corría sin parar, por lo que decidió acelerar el paso. ¿Estaría lavando trastos a esa hora? Se preguntó al verlo de espaldas. - Deja lo que sea que estes haciendo, solo por hoy podemos lavar lo que sea mañana. - Le aseguró para que mejor metieran prisa con las compras y ambos pudieran irse a la cama. Sujk no se giraba, por lo que decidió acercarse hasta llegar a su lado... Se quedó mudo mirando la sangre perderse con el drenaje. - ¿Qué diablos te hiciste? - Musitó a penas. Algo agresivo le sujetó por la muñeca y vio el certero corte en aquel pulgar que dejaba correr sangre por toda la mano.
Sujk Arkhelism
Mierda, mierda, mierda... Estúpido corte, dolía y más que era en esa piel delicada de los dedos, odiaba cortarse por cosas así, sí con una hoja de papel dolía, ahora con el filo de una lata de comida era lo peor. Frunció el ceño al ver que la herida no cedía con la sangre. A lo lejos, escuchó a Yuuto, joder, joder... ¿Cómo iba a esconder eso? Hizo malabares con las manos al tratar de encontrar algo con que tapar su estúpida herida y todo fue en vano. Su novio creía que estaba lavando trastos, así que no respondió a sus palabras, no hasta que éste se fue a asomar y se dio por vencido. De buenas a primeras, Yuuto le jaló con tal impulso que no tuvo remedio. — ¡Ah, me duele! — Se quejó cuando el otro intento ver la herida, joder, que no fuese tan agresivo con esos impulsos. — Por tu culpa me corté, si me hubieses ayudado con la despensa... — Dejó el comentario a medias y le arrebató la mano para volver a lavar la sangre que ya le estaba recorriendo la muñeca. — Tks... — Chasqueó la lengua un par de veces.
Yuuto Shinji
¡Obvio que debía de doler! El corte parecía profundo y encima era en esa parte del dedo tan cercana a la uña. Estaba por soltarle para ir en busca del botiquín... su madre era enfermera, por lo menos una curación y unos vendoletes con cinta adhesiva podría hacerle para cerrar la herida, pero entonces... Sensei le arrebató la muñeca y encima venía a culparle por no echarle una mano con la despensa. Era verdad... por su estúpida rabieta había dejado al otro con todo y ahora... Retrocedió un paso y se quedó mirando la sangre que no dejaba de correr en el lavamanos. ¿Qué podía decirle al respecto? - Ahora vuelvo... - Mejor no decir nada, ni tampoco dejar en claro que esas palabras le habían afectado... El desahogo se lo dejó para medio pasillo, solo ahí se atrevió a dejar escapar el suspiro de impresión que le habían causado las palabras del mayor. Rapidamente se fue por el botiquín al cuarto de baño... esta vez lo requeriría por completo, no era en nada parecido a lo que Waccha le hiciera a Sujk en el rostro hacia poco.
Sujk Arkhelism
Observó a su novio de reojo, al parecer regresaría a la habitación por ese material de curación, pues ese "Ahora vuelvo" se lo dijo todo. Bastó con cerrar la llave de agua para darse por vencido, la sangre brotaba como condenada a muerte, suspiró largamente y cabizbajo se resignó a dejar el dedo desangrado. Waccha se le restregó entre sus pies, para despedirse. — Buenas noches... — Medio sonrió y el pelinegro se pasó a retirar. Yuuto se estaba demorando, no había papel a su alcance, así que para no hacer un camino de sangre, se quedó en el lavabo con la mano dentro de la tarja. Planeaba esconder la herida en un principio porque no quería dar más molestias.
Yuuto Shinji
Al intentar entrar a la cocina, Waccha pasó a su lado... a penas se detuvo un momento para dejarle salir y el felino le rodeó acariciandole con la cola y siguió su camino hasta el sofá. Sujk continuaba en el lavamanos y él se apresuró a darle alcance. - Cerraré esto... - Indicó al cerrar el flujo del agua y colocando el botiquín abierto sobre el escurridor donde colocaban los platos y demás. - Si le dejas caer agua continuamente solo provocas que las pequeñas venas no coagulen y sigan sacando sangre. - Pese a sus explicaciones, en realidad no sentía que tuviera cara para despegar la mirada de su labor... Tomó un poco de agua oxigenada con una torunda de algodón y dio un buen apretón en ese pulgar. - Esto no arde, solo debe dolerte por la presión que ejerzo, pero con ello dejará de sangrar... - Se aclaró la garganta, era lo único que podía hacer cuando no sabía qué más decir.
Sujk Arkhelism
En silencio escuchaba la explicación de su novio con respecto a la herida. ¿Él qué iba a saber de heridas...? Es más, ¿desde cuando Yuuto sabía tanto? Ah, cierto... su madre era enfermera. El agua oxigenada hizo su labor, no ardió tanto como se lo esperaba pero entonces la sangre disminuyo bastante. Observó el rostro del menor, no le miraba como él quería que le mirase, claro que eso de "Es tú culpa" había sido a modo de broma, la culpa era de él por ser descuidado, pero no quería preocupar al menor con cosas absurdas. De pronto se acercó más, recargando su sien con la de su menor, y cerró los ojos. — Gracias... — Susurró cerca del oído ajeno, pero sin afán de querer romper el contacto, Yuuto era tan atento que se sentía más enamorado de él... Qué ridículo era.
Yuuto Shinji
Bien, bastó un buen apretón para que la sangre cediera... Los bordes de la herida quedaron algo blancos por la falta de circulación momentánea, era momento de cortar los trocitos de tela adhesiva para cerrar ambos bordes, pero entonces Sujk se acercó lo suficiente como para poder hablarle al oído. ¿No podía ser peor la situación? - Agradeceme cuando haya arreglado lo que ocasioné... - Susurró ahora tomando las pequeñas tijeras del botiquín y la cinta adhesiva... Con cuidado recortó dos trozos con forma triangular y los utilizó para hacer sellar la piel de esa lesión lo mejor posible.
Sujk Arkhelism
Por segunda ocasión en esa noche, fue que revoleó los ojos y cuando su menor terminó de sellar su herida, se separó un poco y le tomó del mentón de manera repentina para alzar la cabeza de éste a su altura, era suerte que los dos estuviesen de la misma estatura. — Entonces deja que yo arregle lo que también ocasioné. — Le devolvió las palabras y finalmente terminó por juntar sus labios con los ajenos. Sí, le había besado repentinamente, sin aviso, sin previos... Fue un beso necesario, uno que venía ansiando desde hace días, ¿estaba de más si decía que había echado de menos esos labios?
Yuuto Shinji
La herida estaba cerrada, ya no sangraría y seguro que en un par de días comenzaría a cicatrizar, en eso pensaba en el momento en que sensei le obligó a mirarle de frente. Cuando se encontraban en situaciones que no comprendía del todo, en las que no sabía exactamente cómo era que debía sentirse, no era raro que frunciera el ceño muy levemente... nada por molestia, sino más bien desconcierto. ¿Lo que Sujk había ocasionado? Hasta que este se encargó de unir sus labios fue que entendió a lo que se refería... Un beso que prácticamente le robó el aliento por lo repentino, un beso con el cual agradeció ya no llevar nada en las manos, porque seguro que todo lo dejaba caer en el suelo... La noche anterior se había quedado dormido ansiando por un contacto como ese y ahora se abrazaba con fuerza al cuello del mayor, no fuera a ser que intentase separarse demasiado pronto de él.
Sujk Arkhelism
Yuuto correspondió todo contacto, esa boca era deliciosa de mil maneras posibles, esos labios que loco lo traían, eran los mismos que le decían un "Te amo" sincero que le hacía latir su corazón como el de un adolescente. Sus brazos rodearon la cintura y parte de la espalda de su novio, dejando sus cuerpos completamente juntos. Los labios los movía sobre los de Yuuto, primero lento, luego con intensidad y al final se daba en la tarea de ladear la cabeza para que esos besos fuesen profundos; a cada beso, un topón se formaba con sus narices... Amaba besarlo no podía contener esa dependencia que tenía sobre la boca de su compañero, novio, amante y amigo...
Yuuto Shinji
Con Sujk le pasaba que muchas veces deseaba jamás haberle conocido, era demasiado fácil pensar en que de ahí en más le añoraría durante toda su vida... Mientras ambas manos se dedicaban a entretener los dedos de manera suave entre los cabellos de Sujk, su boca se afanaba en intentar seguirle el ritmo ahora que esos fuertes brazos le cobijaban entre ellos. Tuvo que ladear el rostro en dirección contraria al mayor, de alguna manera no les bastaba el contacto que ya tenían sus cuerpos, los labios también debían compenetrar perfecto... Así era, parecía ser así todo entre ellos, encajando perfecto en cuanto a casi todo... La mano diestra se aventuró a acunar el rostro ajeno, necesitaba algo de espacio entre sus bocas... Mientras la zurda continuaba acariciandole el cabello, a penas sus rostros se separaron cosa de un par de centimetros, esperó a que su pareja abriera los ojos. - Te amo, te extraño, extraño tus besos y me saca de quicio que me veas la cara de idiota como hace un momento en el auto. - Practicamente le espetó con tono severo.
Sujk Arkhelism
Podría pasar horas gastándose esos labios que le pertenecían, pero sabía que en un momento determinado el aire se le escasearía. Tan perfecta era la manera en que encajaba todo con ellos, sus besos, la forma en que se abrazaban... Sus palabras, todo. Yuuto era su amor perfecto en ese mundo imperfecto en el que vivían... Con defectos o no, ese guitarrista lo era todo. Cada una de esas caricias era bien recibidas, y le hacían sentir lo que nunca había sentido, pero de pronto las palabras de su menor le hicieron enmudecer... — Te amo, me fascinas... No fue mi intención... — Con un beso esquimal se estaba disculpando con su menor. — Tuve que aguantarme... Soy presa fácil para tus labios... — Murmuró dándole uno que otro beso corto a su novio. ¿En qué momento se habían sumergido en su burbuja de cursilería?
Yuuto Shinji
Si, era claro que escuchaba las declaraciones de sensei, y tan las escuchaba que no podía evitar desviarle la mirada avergonzado... No entendía cómo era que al otro se le facilitaba tanto externar esas cosas. - No se cómo es que puedes ser mi presa considerando que ya estoy vestido en pijama, la cosa menos seductora del mundo. - Argumentaba mientras se dejaba hacer en medio de esos besos de esquimal. - Vayamos ya a la cama, viejo. Mañana prometo que seré yo quien termine de levantar todo esto ¿si? - Con el pulgar acariciaba la mejilla del mayor, curiosamente deslizó las caricias hacia la sien que un par de noches antes Waccha había agredido... esos rasguños casi habían desaparecido. Él por su parte bostezó, teniendo que girar el rostro para poder hacerlo.
Sujk Arkhelism
— Tu pijama de felpa es seductora. — Rió levemente con el tema de la pijama de su novio, la verdad es que poco importaba cómo estaba vestido el otro, aveces el mote de "bebé" le quedaba perfecto... — No prometas nada, mejor vamos a la cama. — Suspiró por las atenciones de su menor y entonces se lo llevó hasta la habitación a paso lento y entre besos divertidos y cómplices. Sí, comenzó a atacarlo por medio de los famosos "picotazos" como le decía la mayoría de la gente. Entre risas, apagó la luz de la cocina y se siguió por el pasillo sin dejar de robarle besos a su novio.
Yuuto Shinji
- ¿Seductora dices? ¿Me la has regalado con toda alevosía y ventaja? - Entre broma y broma la casa iba a quedando a oscuras en medio de sus pasos torpes. Solo a ellos se les ocurría recorrer el pasillo abrazados y atacándose mutuamente a besos. Llegaron a la habitación... - Quieras o no mañana me despertaré temprano para ayudarte con lo que faltó. - Le aseguró una vez se pudo liberar de los brazos del otro que aún no se ponía la ropa para dormir. Él por su lado se metió a la cama, las cobijas ya estaban revueltas, pues con anterioridad ya había estado ahí con Waccha... Los bostezos volvieron a atacarle, medio alcanzaba a mirar a su pareja cambiandose de ropa, pero la imagen poco le duro porque... aunque temblaba por el frío en sus pies, la cosa era que ya se había quedado dormido y sin decir buenas noches siquiera.
Sujk Arkhelism
— Te regalaré pijamas más seguido. — Fue lo último que dijo, pues ya estaban dentro de la habitación; allí, Yuuto le soltó y él se fue a cambiar, estuvo a punto de decirle algo pero cuando se giró su guitarrista se había quedado dormido completamente. Apuró el paso y apagó las luces para meterse a la cama. Envolvió los pies de Yuuto con los propios y le abrazó hasta acunarlo entre sus brazos. — Buenas madrugadas... — Le susurró para luego cerrar los ojos, era noche y habían cosas por hacer en unas horas.
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